Ya he podido ver la última película de Fernando León de Aranoa y he de decir que como siempre ha dado en el clavo. Si con Familia nos descolocó con una historia original sobre las miserias de un hombre tan insoportable que necesita una familia de alquiler, en Princesas nos cuenta la historia de mujeres que se aíslan de sus familias, escondiendo su verdadero ser.

Aranoa perfila magistralmente los personajes principales y permite que observen su mundo particular desde una peluquería que se convierte en un observatorio privilegiado de las miserias que asolan sus vidas.

La clave de la película es la imposibilidad de contar lo que no pueden decir, o lo que no se quiere creer. La falsedad de una sociedad que las mira mal y distingue entre clientes y putas, cuando son dos caras de una misma moneda. Un estigma que las lleva a echar de menos vidas que no han vivido, momentos mejores; una añoranza que persigue hasta a la madre de la protagonista, que se manda flores para crear una nueva ilusión de un amor pasado.

Una película totalmente recomendable, con un director que siempre da en el clavo y dos actrices en el papel de sus vidas.

Corto y cambio,